Mientras que una buena elección de las zapatillas de running es un factor fundamental para entrenarse en invierno, el cual no debe pasar por desapercibido debido a que es la estación climática enemiga de quien se prepara para una competencia.( Te aconsejamos que visites este sitio para obtener más info sobre zapatillas de running).
Los pies son la principal herramienta del cuerpo en este caso y por eso debemos protegerlo a través de los calzados que soportan la ola frío de estos meses del año, etapa en la que especialistas en la materia aconsejan doblegar fuerzas de voluntades para amalgamar kilómetros (K) y amoldar el cuerpo a la exigencia de la carrera que uno se esté entrenando.
Al final del texto, presentamos cinco tips a tener para prestarle atención para practicar este deporte pese a las bajas temperaturas.
¿Cuál es el mejor horario para salir a entrenar con zapatillas de running?
Si bien es verdad que durante la primavera y hasta el principio del otoño es cuando cada runner aprovecha más cada jornada para fortalecer el acondicionamiento de su estado físico, el invierno suele complicar esa tarea. Pero salir a correr dos o más veces en el día, puede vencer adversidades presentadas por el frío.
El doble entrenamiento puede ser iniciado durante las primeras horas de luz solar, y aunque las mañanas comienzan frescas, si es vista desde una óptica distinta, un buen abrigo puede ser una solución al inconveniente llamado frío. Pasados los primeros minutos, el abrigo no será necesario.
Una vez finalizada esa primera etapa, después de un descanso, una alimentación posterior y buen estiramiento de los músculos del cuerpo para evitar los tradicionales calambres, un runner puede dar luz verde a una segunda fase durante la tarde.
¿Cómo sumo kilómetros si nunca corrí?
No se trata de salir a correr a gran velocidad y ganarle a todo el mundo que aparezca en mi camino. Al principio la cuestión principal está atravesada por encontrar un ritmo adecuado para saber la exigencia de nuestro cuerpo. Una vez logrado ese punto medio de partida, podemos empezar a incrementar el nivel de demanda impuesto.
Es decir, la idea inicial es trotar lo que nos dé el cuerpo para después saber cuánto exigirnos cuando salgamos nuevamente al asfalto. No está de más recordar que cuando nos comience a faltar el aire, no dudemos en caminar para estabilizar el ritmo cardíaco y aprovechar para hidratarnos.
Una vez establecido el ritmo de entrenamiento, el cuerpo se siente preparado para los desafíos y es capaz de soportar exigencias sin ningún tipo de molestias producidas por el estrés. En otras palabras te sentís listo para sumar kilómetros.
¿Cuándo inicio el entrenamiento en doble turno?
Una vez amoldado el cuerpo para soportar nuevas metas, lo mejor es ir subir el nivel de exigencia moderadamente. Por ejemplo, si empezamos arrancando con 5k, podrían agregarse entre 1K y 5K en la próxima carrera, al cumplir un cierto tiempo físico de adaptación.
Para brindarle resistencia al cuerpo, también es aconsejable combinar ejercicios con otros que no sean necesariamente de alto impacto, como el practicar ciclismo, natación, o simplemente salir a caminar.
De ese modo iremos preparando al cuerpo para que pueda soportar un doble entrenamiento de running, el cual podría ser regular al practicarlo entre dos o tres veces a la semana. Se trata de avanzar lento mientras se está apurado, para no padecer molestias a futuro.
Exigencia a conciencia
El doble entrenamiento running es sin dudas un factor agregado a nuestro cuerpo, que hace que la masa corporal se acomode a un ritmo cada vez más elevado del habitual. Unas buenas zapatillas de running serán esenciales para soportar esa exigencia cada vez más rígida.
Un primer entrenamiento puede ser realizado de una manera más suave que su predecesor, para que el cuerpo llegue más cansado a la segunda etapa. El acto siguiente será decisivo para marcar la diferencia deportiva, y hacer descargar la energía guardada con la que buscamos marcar la diferencia.
No obstante, antes de empezar la sobrecargar del cuerpo, uno debe ser consciente de lo que puede llegar a aguantar al sumar esos nuevos kilómetros, sin dejar de estar pendiente de las consecuencias que den ese incremento.
Dividir para triunfar
Para lograr un buen rendimiento puede partirse las horas reloj en dos partes. Durante las primeras horas del día una persona puede elegir por trotar desde las 8 am hasta la media mañana, para luego en el segundo ensayo maratónico aplicar el extra antes mencionado y marcar una distinción notable donde veremos que la preparación previa valió la pena.
Esa división traerá beneficios como la sumatoria de una mejor tenacidad y velocidad, debido a que a veces no logramos el ritmo deseado por la energía quemada en el primer acto de adiestramiento.
Profesionales del runner sostienen desde el punto de vista fisiológico, que resulta más factible correr dos veces separadas en lugar de hacer todo de una sola vez, donde lo único que vamos a ganar es acumular mayor cansancio.
Recomendaciones médicas:
Lo sugerido, generalmente, es que una persona lleve adelante una buena nutrición deportiva.
En tanto, los deportistas y médicos advierten que si un individuo sale 1 hora diaria, esa quemada de grasa hará que se acumulen 2 horas de entrenamiento.
● 5 recomendaciones para elegir zapatillas de running en invierno
Tener en cuenta el calzado que mejor se adapte a tu pie y buscá que no filtre el frío.
En el caso de que notes que no dejan entrar el frío, y es un calzado duro, no las uses para
correr debido a que te producirán una falencia a larga.
Tené en cuenta en qué terreno las vas a utilizar y la distancia que vas a correr, recordando que deben ser zapatillas con una suela de grueso espesor.
Es fundamental que sean flexibles y tengan buena amortiguación al momento del impacto.
Sentilas justas al probarlas, es decir, ni apretadas ni sueltas.